Durante muchos años, Praesidium ha podido observar que la mayoría de las personas, organizaciones e incluso industrias, se encuentran en algún punto del espectro entre una mentalidad de conformismo, cumplimiento o compromiso.

El espectro de las 3 C de Praesidium delinea los distintos niveles de enfoque y dedicación con respecto a la prevención del abuso/acoso.

En un extremo, tenemos el conformismo, donde las organizaciones pueden inconscientemente, negar la posibilidad de abuso/acoso y pasar por alto medidas de seguridad cruciales. El cumplimiento se encuentra en un punto medio de este espectro. Implica la adhesión a normas externas (exigencias legales) sin necesariamente internalizar los principios más profundos de prevención. En el otro extremo se encuentra el compromiso, donde la prevención del abuso/acoso no es sólo una casilla de verificación, sino un espíritu profundamente arraigado y defendido desde los más altos niveles de liderazgo.

Profundizamos en estos tres paradigmas explorando el poder transformador del Compromiso para fomentar entornos de seguridad y confianza para las poblaciones vulnerables.

El conformismo se ve típicamente en organizaciones que niegan que puedan ocurrir abusos/acosos en sus espacios. Es posible que se sientan tranquilos y que crean que todos los flancos están cubiertos, en parte porque quizás nunca hayan experimentado un incidente grave. Algunas características de las organizaciones conformistas:

  • Negar que algún incidente de abuso/acoso pueda ocurrir.
  • Confiar en que los éxitos pasados prevengan abusos/acosos futuros.
  • Tener pocos procedimientos estandarizados.
  • Tratar los incidentes como problemas de colaboradores en particular (una vez desvinculado la persona, el problema se “acabará”).
  • No priorizar la inversión en prevención de abusos/acosos o destinar presupuestos mínimos.

El cumplimiento a menudo describe a las organizaciones que asumen que son “seguras” en función de su cumplimiento de estándares externos, generalmente exigencias legales. Organizaciones en etapa de cumplimiento:

  • Consideran el riesgo de abuso/acoso como un desastre natural, por lo que asumen que son incidentes que no pueden prevenirse; como resultado, las políticas y la capacitación se centran en cómo reaccionar después de un incidente o sospecha de abuso/acoso.
  • Utilizan las exigencias legales como estándares de prevención.
  • Establecen políticas escritas relevantes para la gestión de riesgos, pero no entregan de manera consistente “el por qué” o la justificación que forma la base de la política. Como resultado, las políticas no se implementan plenamente.
  • Identifican a personas o departamentos específicos como responsables de la prevención.

El compromiso existe cuando el liderazgo organizacional prioriza la prevención del abuso/acoso a un alto nivel. Las organizaciones comprometidas se aseguran de que sus estándares sean claros, bien comprendidos por sus colaboradores/as y seguidos de forma continua. Una organización comprometida promueve:

  • El liderazgo más alto demuestra públicamente, a través de palabras y acciones, el Compromiso de la organización con la prevención del abuso/acoso de manera continua.
  • Identifica y empodera a una persona o grupo de referencia para supervisar las iniciativas relacionadas con la prevención del abuso/ acoso, pero entrega a cada rol un papel activo en esta.
  • Establece estándares de mejores prácticas para las interacciones, incluidos límites apropiados e inapropiados y cómo gestionar actividades de alto riesgo.
  • Integra la gestión del riesgo de abuso/acoso en el proceso de contratación de todos los nuevos colaboradores/as.
  • Capacita a todos los colaboradores/as sobre contenido impactante para la prevención del abuso/acoso y tiene mecanismos para mantener una alerta continua.
  • Tiene una cultura de documentación de informes que pueda informar en exceso, pero nunca reaccionar de forma exagerada.
  • Trata todas las denuncias, sospechas e incidentes como una oportunidad para fortalecer sus esfuerzos de prevención.
  • Dispone de sistemas para responsabilizar a los colaboradores de priorizar la seguridad.

Impacto de las tendencias en las tres C

En los últimos años, hemos sido testigos de un aumento sin precedentes en la conciencia pública sobre el abuso/acoso sexual organizacional, lo que ha resultado en una gran demanda de responsabilidad en los esfuerzos de prevención y respuesta en todas las industrias. Varios casos e investigaciones de alto perfil han arrojado luz sobre nuestra comprensión general del alcance y la dinámica del abuso/acoso sexual, lo que hace que el conformismo sea aún menos aceptable. Aunque muchos de estos casos son de naturaleza histórica, su impacto está dando forma a cómo las organizaciones avanzan para crear entornos seguros y respetuosos en el presente.

A medida que más organizaciones transitan desde el conformismo, existe la tentación de quedarse estancadas en una mentalidad de cumplimiento. La “trampa del cumplimiento” es peligrosa porque las organizaciones pueden considerar que están haciendo “algo” para evitar el abuso/acoso cuando, en realidad, simplemente están “marcando una casilla”. Esto puede conducir rápidamente a una falsa sensación de seguridad. El desafío de Praesidium es continuar ayudando a que las organizaciones avancen hacia el Compromiso.

Conclusión

El compromiso con la seguridad y es el respeto es el principio más importante a la hora de evaluar la protección de las poblaciones vulnerables. A medida que las instituciones adoptan el espíritu del Compromiso, se embarcan en un viaje de transformación, donde cada acción, política y decisión está impregnada del deber de proteger.

Al priorizar la prevención del abuso/acoso en todos los niveles y empoderar a defensores apasionados, las organizaciones refuerzan sus defensas contra daños potenciales y fomentan culturas de seguridad, compromiso, compasión y rendición de cuentas. No nos conformemos con el mero cumplimiento ni nos quedemos en la conformismo, sino que luchemos por alcanzar la cima del compromiso, donde la seguridad y el bienestar de todos los miembros de la organización sigan siendo prioridades inquebrantables.

Obtenga más información sobre las 3 C y cómo su organización puede avanzar hacia el Compromiso en Praesidum Chile.