En abril, mes de la Prevención del Abuso Infantil, Praesidium comparte recomendaciones de la Fundación Cuidemos la Infancia:
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Comunicación continua y abierta, muy cotidiana, con hijos e hijas, que ellos sepan que se puede hablar y expresar distintas emociones, situaciones, o temas, y serán escuchados sin juzgarlos.
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Frente a lo que nos digan, respondemos acogiendo y dando crédito, que sepan que les creemos, sin cuestionar (si hay dudas e inquietudes que nos surjan como adultos frente a ciertos relatos infantiles, las podemos resolver o abordar después).
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Estar atentos a cambios de conducta o ánimo de los niños y niñas.
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Pedir orientación como madres y padres cada vez que la necesitemos.
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Enseñar desde pequeños las partes del cuerpo con sus nombres, y explicar que hay partes que son íntimas, o privadas; que existen límites.
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Fortalecer su autoestima.
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Compartir con otros adultos de nuestra familia, amistades, vecinos, etc., que el tema de la prevención del abuso sexual infantil merece nuestro atención y nos ocupa prevenirlo por nuestros hijos y también por todo niño, niña o adolescente.
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Conocer factores de riesgo y protectores en el abuso sexual infantil. Por ejemplo, un factor de riesgo muy asociado al abuso, es el alcohol.
Fuente: cuidemoslainfancia.cl